Recién se estaba bajando del bus, aquel que la dejaba en la parada de su casa, cuando vio a alguien que le alegro la tarde. Era él, con aquella sonrisa que podía calentar cualquier corazón frío. Ella de inmediato se sonrojo, y no supo a donde mirar. Decidió mirar el suelo y la pared que se encontraba detrás de él. Él se subió al bus y ella siguió caminando en dirección a su hogar, a su refugio. Cuando llego a su casa comenzó a sonreír como la perfecta loca enamorada.
Me gusta mi auto, pero prefiero andar en bus. De esa manera puedo dormir un rato mientras llego al trabajo; cuando llega el bus a la parada, noto que se está bajado del mismo, mi chica. Ella me ve, pero de inmediato retira la mirada y puedo notar que se sonrojo; ella comienza a mira el suelo que al parecer esta interesante. Me dirijo al bus y subo, cuando me siento en el puesto que se encuentra cerca de la ventana, vi que ella sonreía, y todavía estaba sonrojada por mi presencia. Hoy será un gran día.
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